Cuando mi socia, la Misses Clegg me habla del "maricòn sonriente" refirièndose a un colega con el que estamos cerrando un negocio, es justamente la descripciòn exacta del vendido a la vista. Ese personaje que mira de frente esbozando una extraña sonrisa que da un poco de asco. Ese que esta en esa pero a la vez piensa y siente otra cosa.
Y es que la gente anda por el mundo tratando de caer como sea en esta vida, lograndolo y no. Pero hace el intento. Y a la vez hacer el intento tambièn es lo peor. Mejor hacerlo de una y no intentar nada.
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