Esta elección, tan llena de diversidades, ha sobrepasado mis expectativas como ciudadana sin militancia política, viviendo de lo privado de mis negocios, con mi libertad de acción / opción y además en provincia.
Como es tan distinto el escenario político, con gente antigua dispuesta a ser reelecta una y otra vez, y un candidato travieso y atrevido, al que se le ha acusado de estar coludido y financiado con la derecha, pero con una proveniencia de izquierda, hijo real y cierto de la dictadura con exilio incluido, padre asesinado, todo es tan raro que me sumo a las caras de esperanza de tantos.
Ayer me confesó una pinochetista de tomo y lomo, además apoderada general de Piñera en un colegio de la región, que vota por M.E.O y que todos los pinochetistas de la zona votan por él y no por Piñera, por traidor. Porque sienten que Marco siendo un hombre izquierda, exiliado, con padre muerto y todo, tiene menos resentimiento que cualquier otro de la concertación.
Estos curiosos votos ocultos, no han sido contabilizados en ninguna encuesta. Como también el voto de los tantos activistas pagados por los comandos, que no votan precisamente por el candidato de la coalición que promueven. ¡Y para que hablar de los votos cruzados, que votan por un candidato y por senador o diputado por otro!
¿No ha alcanzado a tener el ciudadano común y silvestre, suficiente información cívica en estos más de 20 años de democracia, y luego de la larga dictadura, que los poderes del Estado son 3 (independientes unos de otros) y que entre el ejecutivo y el legislativo (momento éste de elecciones presidenciales (ejecutivo) y parlamentarias (legislativo) debe existir una cercanía política para lograr los proyectos de ley que por años siguen “en trámite” en el Congreso para beneficio del pueblo?
Estoy al tanto de los primeros cómputos, que muestran que mucha gente está dispuesta a vender a su país con el candidato de la oposición, otros se atreven a votar por la real diferencia, unos cuantos recuerdan viejos gobiernos y la protesta sigue haciéndose presente en el voto del 1.
