(a A.L.W)
Las hojas se arrastran por las calles de Santiago. El viento las lleva y eleva.Las arrastra, las da vueltas. Y hoy mi vida se da vueltas también, como esas hojas que son otoño, que terminan de ser vivas desde que se secan y caen del arbol para que el viento las arrastre por las calles, por el pavimento, por las plazas y las veredas.
Cuantos meses escribí. Y cuanto no escribí.
Cuantos meses fueron los de amar en la fiesta de la "Ella baila sola". Tal cual.
Cuantos meses no escribí lo que ahora debo gritar,
para que se me olviden los recuerdos también
y de raíz , las hoja secas, como las de las rosas que se secan en mi baño,
se mueran de una vez y caigan a pedazos para yo también pisarlas y que al fin queden tendidas en el suelo.
Se muere el poeta Gonzalo Rojas y todos lo citan hoy.
¡Como si no pudiera yo citar los versos de Jorge Montealegre, otro gran poeta, en su poema "Frutos del País" y que dice: " Que yo sea un poeta del montón, habla muy bien de mi país. En Chile hay un montón de poetas".
Y ya no es moda nada.
Ni moda es la frustración.
Me siento lesionada, como quien se atreve a correr horas sin un previo entrenamiento.
Me siento libre y agotada.
Siento siempre haber estado "siendo" lo que soy, para hoy saber que lo único cierto soy solo yo.
Yo en este univeso de ilusión abandonada. Yo sola en esta vida que sigue y sin extra alguno tal cual continúa.
No hay más.
Que se vayan los recuerdos al cajón, y mi vida vuelva a ser solo mía.Para mí. Para mi Fatty Fatty, incondicional siempre, presente y también de todos los que amo.
Que se vayan todos los recuerdos y se muera la ilusión, que la gente es tal cual es y yo aunque intenté ser maestra del amor, no exigí a mi alumnado superarme, ni siquiera igualarme.
La vida sigue. Así dice la sabia de mi pseudo madre, tía Delia. Dorita: La vida sigue.